Por Jorge Madrid
A partir el 15 de septiembre este año 2025 tomarán protesta 32 magistradas y magistrados que integrarán el nuevo Pleno del Supremo Tribunal de Justicia de Michoacán, así como cinco magistradas y magistrados del Tribunal de Disciplina del Poder Judicial del Estado, y además se integrará un órgano de administración.
El Pleno del Supremo Tribunal, continúa siendo el órgano colegiado que encabeza la tarea sustantiva y fundamental de ese Poder, que es la jurisdiccional, impartir justicia, conciliar, dirimir y/o resolver controversias; responsabilidad original, fundamental e imprescindible que data desde la concepción de la división de poderes y que está reflejada en la Constitución Federal y en la propia de Michoacán.
El Tribunal de Disciplina tendrá como facultad primordial la de ser el órgano colegiado de prevención, vigilancia e instauración de procedimientos de responsabilidad en contra de los operadores jurisdiccionales, así como de visita e inspección del quehacer público de los servidores de dicho Poder. Tendrá este Tribunal la posibilidad de sancionar a escribientes, archivistas, actuarios, secretarios o jueces, pero estará limitado para sancionar a magistrados por el fuero constitucional y por existir un procedimiento especial por medio del juicio político ante el Congreso del Estado.
El Órgano de Administración del Poder Judicial nace también con la reforma constitucional, cuya actividad primordial será el manejo y administración eficiente, eficaz y transparente de los recursos públicos (financieros, humanos, materiales); este órgano estará integrado por tres integrantes del propio Poder Judicial, por un representante del Poder Ejecutivo y por otro del Poder Legislativo. La escuela judicial dependerá de este órgano colegiado, y uno de los grandes retos que tendrán en el corto plazo es la implementación del Código Nacional de Procedimientos Civiles que deberá estar en marcha en el año 2027, para lo cual se requiere capacitación e infraestructura, pero además el órgano tiene la misión de gestionar recursos y de culminar varios inmuebles para su funcionamiento en el interior del estado.
Los retos que tiene el Poder Judicial de Michoacán a partir del 15 de septiembre son importantes, por ello resulta trascendente que se tenga una visión precisa y puntual, aunado que es indispensable que exista diálogo permanente y respetuoso con los otros poderes para fortalecer la capacidad de gestión que permitan lograr los objetivos, planes, programas y proyectos para un mejor Poder Judicial en beneficio de la gente.
Finalmente debe quedar claro que el diálogo y entendimiento con los otros Poderes debe darse con pleno respeto y garantizando la autonomía e independencia judicial, y claro, sin confrontación, para lo que se ocupa altura de miras, visión de estado y mucha tarea política.
