Por: Leovigildo González
Al menos siete funcionarios han sido identificados que además de percibir su salario, también reciben como maestros de educación básica, que lo vuelve en un claro conflicto de intereses ya que esas plazas fueron designadas por ellos mismos.
Gabriela Molina, titular de la Secretaría de Educación afirmó que van a dar de baja a más de 350 plazas que se supone son «aviadores» (personas que cobran sin trabajar), sin darse cuenta que su personal de confianza lo hace.
Tal es el caso de Doroteo Vanegas Zavala, quien es subdirector de nóminas de dicha dependencia el cual percibe un salario de 29.596,54 pesos netos, sin embargo, recibió el 30 de septiembre la cantidad de 9 mil 978 pesos con 54 centavos con una plaza de educación primaria.
Así como él, Norberto Hernández Villaseñor además de cobrar como jefe departamento de normatividad, también lo hizo con su plaza de maestro que incluye una compensación y apoyo para despensa.
Lo mismo sucedió con Ulises Edmundo Chávez Ramírez quien está asignado como titular de la unidad de vinculación y asistencia técnica de la Subsecretaría de Administración, el cual además de percibir su salario como funcionario lo hizo como profesor, aunque en el segundo trabajo es evidentemente no se ha presentado.
En ese mismo contexto se encuentran Javier Hernández Aguilar, jefe de la Unidad de Control Operativo; Luis Carlos Arredondo Tentory, jefe de departamento de personal transferido; Paulina Martínez Cerna, subdirectora de personal y la subdirectora de Pagos de Servicios Personales, Erika López Guerrero y Javier Omar Fernández Aguilar, titular de Unidad Control Operativo.
Todo esto, se ha realizado bajo las funciones de Gabriela Molina quien ha lanzado llamados para evitar estás prácticas, sin embargo, se realizan en la dependencia que ella dirige.
A continuación el comprobante fiscal de pago de Doroteo Zavala Venegas, como parte del sistema de educación básica, con compensación y bonos.