Por: Diego Donaldo Chávez Palmerín/ El Último Llamado
Ciudadanía: Condición que reconoce a una persona una serie de derechos políticos y sociales que le permiten intervenir en la política de un país determinado; Oxford Languages. Defender: Mantener, conservar, sostener algo contra el dictamen ajeno. RAE.
¿Hasta dónde como Ciudadanía nos puede alcanzar para defender una causa, un cambio o un Derecho? El pasado 13 de noviembre del 2022 se vio por primera vez en México lo que se pensaba nunca nos alcanzaría, una marcha de miles de ciudadanas y ciudadanos (la mayoría no militantes) para exigir conservar un derecho.
3 meses y 13 días después con mayor información, con una reforma que no transitó en lo Constitucional, pero si en las leyes secundarias, la ciudadanía se volvió a organizar para salir a las calles de manera pacífica, cambiando la narrativa de defender un Instituto a defender su voto. Sin embargo, hay que voltear analizar hasta donde nos están llevando los promotores de este “cambio” democrático, que aun con mecanismos institucionalizados y constitucionalizados han logrado hacer fraude a la ley o como dicen en mi pueblo “encontrar vacíos legales”.
Dos manifestaciones donde mas de 1millon de personas han participado pacíficamente, transiciones con legalidad y certeza y sobre todo alternancia en la representación, hoy dependen de un hilo llamado SCJN, hilo que cuenta con un armamento jurídico y Constitucional tan fuerte como para enfrentar al poder, y aun así depende de la conciencia de 4 personas, veremos de que talla están hechos.
Todo hombre que tiene poder, se inclina por abusar del mismo; va hasta que encuentra límites. Para que no se pueda abusar de este, hace falta disponer las cosas de tal forma que el poder detenga al poder; buenos tiempos para recordar a Montesquieu.
Sea cual sea la resolución de la SCJN quien busque acceder al poder público, tendrá que contar con una diferencia de votos contundente y que no genere dudas para malas interpretaciones, no vaya ser…
Tw.@Diego__Chávez