Por: Leovigildo González
Hay espacios en el Gabinete de Bedolla que no son más que un pago político, tal es el caso del titular de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), Cuauhtémoc Ramírez.
Ese espacio es una clara muestra de un pago político a Jesús Reyna, ex gobernador priísta de Michoacán, sin embargo, los pocos resultados de Ramírez exhiben que ya es un perfil anquilosado.
La falta de atención a muchas organizaciones campesinas también muestran poca capacidad al frente de uno de los temas torales de la administración de Bedolla.
Mientras el equipo de Reyna está enfocado en buscar ser un partido político también han abandonado a Ramírez, quien entre morenistas, ex perredistas y priístas parece que no encuentra el rumbo.
Es momento de que el Gobernador tome cartas en el asunto, si es por un pago político ya fue, y si es por capacidad, ya hemos visto que ahí no es.