Por: Hugo Villa
El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, ha quedado a deberle a los morenistas que lo apoyaron a llegar al lugar en donde está.
Los morenistas que lo acompañaron en sus aspiraciones han sido relegados, quienes han visto que el ahora gobernador ha preferido a perredistas, priístas y panistas en puestos de su administración.
Simplemente, su ex coordinador de campaña Raúl Morón, se mantiene al margen aunque también ha sido alejado de los puestos de poder y su equipo no fue tomado en cuenta.
Hay «grillas» al interior de la administración morenista de Bedolla, ya que los puestos más importantes no están conformados por quienes han sido del partido del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Ana Lilia Guillén también fue relegada, y no se diga Juan Pérez quienes ahora pelean el partido de Morena, aunque también parece que solo buscan ser tomados en cuenta.
Solo los «Morenos de Corazón», son quienes parecen contentos con el actual Gobernador aunque no tienen puestos de primer nivel, sin embargo, ahí están tomados en cuenta.