Por: Hugo Villa
Siendo uno de los canales de comunicación más efectivos entre empresa-cliente, es recurrente que estos sean una vía o ventana para diversos ataques a sus usuarios.
Los mensajes de texto conocidos como SMS (Short Message Service) son uno de los canales de comunicación con mayor tasa de apertura y mejor visibilidad, por lo que se han convertido en el canal ideal para las empresas que buscan que sus consumidores no solo reciban información, sino que también la lean. Sin embargo, siendo uno de los canales de comunicación más efectivos entre empresa-cliente, es recurrente que estos sean una via o ventana para diversos ataques a sus usuarios.
De acuerdo con Retruster, los intentos de phishing crecieron un 65% el último año. A nivel mundial, México ocupa la posición número 25 con más ataques de phishing, y en América Latina ocupa el lugar 12, de acuerdo con Kaspersky. Tan sólo de febrero a marzo de este año, Kaspersky detectó un aumento del 30% en ataques de phishing contra teléfonos móviles en México.
En los últimos años, los SMS se han vuelto una herramienta de phishing, delito cibernético en el que un usuario es contactado por estos mensajes, teléfono o correo electrónico por alguien que se hace pasar por una empresa o institución legítima con el objetivo de recabar datos confidenciales, como datos bancarios, contraseñas e incluso información de identificación personal, sin embargo durante la pandemia, éste ha incrementado.
Siendo uno de los canales de comunicación más efectivos entre empresa-cliente, es recurrente que estos sean una vía o ventana para diversos ataques a sus usuarios.
La tasa de lectura de SMS es del 98%, según los datos de Gartner, y el 90% se lee dentro de los 3 minutos posteriores al envío, es por ello que en un mundo donde los canales de comunicación son ilimitados, los SMS se han vuelto muy atractivos para las estrategias de comunicación de las empresas y marcas alrededor del mundo.