Por: Leovigildo González
En la comunicación política, es imprescindible conocer los momentos de exhibir una ‘jugada’, el líder de Acción Nacional, Marko Cortés, se adelantó y cayó directo en la estrategia del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Durante los últimos 20 años, hemos escuchado al ex líder perredista, hablar de una ‘mafia del poder’ conformada por el ya famoso ‘PRI-AN’, su acérrimo enemigo al cual se le debe de vencer para que haya ‘crecimiento para el pueblo’.
Con ese discurso de confrontación, en el 2006 estuvo a punto de llegar al poder, sus ‘enemigos’ a decir de él, no lo dejaron llegar, el PRI-AN, lo había hecho de nuevo.
AMLO es un ‘lobo político’, conoce todas las artimañas para posicionar mensajes en la agenda pública, crea fantasmas y habla constantemente de enemigos, una fórmula muy básica de echar culpas, así perdió en el 2012, ante un Enrique Peña Nieto que para él representaba la corrupción del país.
Seis años más tarde, ya en el 2018, se empeñó en aumentar sus enemigos, ahora a su lista se le unía el PRD y Movimiento Ciudadano (MC), por la sencilla razón de no apoyarlo. Olvidándose de que él salió de filas perredistas y que MC (ex Convergencia) lo habían acompañado en sus dos intentos presidenciales.
Ya en el poder, busca generar ese discurso de confrontación, insisto, una forma básica pero eficiente de echar culpas, ahora con un documento de difícil autenticidad llamado «Rescatemos a México, proyecto BOA (Bloque Opositor Amplio)».
Es sumamente estúpido e ingenuo pensar que el proyecto de una posible alianza opositora se pusiera en un documento en PDF, al alcance de cualquier persona para que en un «descuido» terminará en las manos del Presidente.
Nuevamente puso en marcha su estrategia de confrontación desde el mismo Palacio Nacional, donde diariamente tiene un púlpito y lanza cualquier tipo de ataques a sus ‘opositores’.
Ahí fue el error, Marko Cortés afirmó que no descartaban una alianza con PRD y MC, a un año de las elecciones, lo cual no es descabellado ya que así estuvieron en la boleta electoral del 2018, sin embargo, le puso el ‘cascabel’ a la BOA, cayendo así en la estrategia presidencial y poniéndose de ‘pechito’ para los golpes con AMLO, en un desgaste completamente innecesario.
En el 2021 no van contra el Presidente, van contra su proyecto autodenominado ‘4T’, desde la Cámara de Diputados, donde las decisiones de AMLO deberán tener un contrapeso, el cual en estos momentos, no existe.
MC se desmarcó de la posible alianza, en una estrategia de sobrevivencia, o ¿Ya nos olvidamos las revueltas en Jalisco hace unos días?, Alfaro es el único gobernador de ese partido, su carta fuerte en todos los sentidos y al cual debilitó con una confrontación que al menos a los jaliscienses no benefician en lo absoluto.
Habrá que entender que el BOA posiblemente exista en ‘las mentes de muchas personas’, pero ¿ya vieron que aglutinó a sus opositores? y desde ahí busca debilitarlos, el Presidente sabe que ahora más que en otro momento, su proyecto está endeble y que se puede jugar gran parte de su sexenio.
Marko Cortés lidera al partido con mayor fuerza de la oposición, sus pasos, estrategias y deslices, se notan, pero sobretodo tendrán repercusión en la próxima elección.