Por: Leovigildo González
Este martes en el Congreso de Michoacán no hubo discusión de propuestas, por el contrario, fue un día lleno de dolor, impotencia y mucha consternación.
Erik Juárez Blanquet fue despedido, su hermana, Mary, exigió justicia, entre un llanto que le quebraba la voz constantemente.
«Queremos justicia» le pidió al secretario de Gobierno, Carlos Herrera quien acudió al Palacio Legislativo en representación del Gobernador Silvano Aureoles.
Su amiga y compañera, Miriam Tinoco, en el pleno no pudo resistir el llanto, recordó los momentos en que la amistad los unió, y de igual forma exigió justicia.
Michoacán perdió un legislador, al hijo predilecto de Angamacutiro, el Congreso de Michoacán lo sintió.