Recuerdos de Reportero/ Leovigildo González
El legislador perredista con licencia, Adrián López Solís, se ganó el respeto de los integrantes de su partido en el Congreso del Estado y también de otras bancadas, su astucia para hacer política lo han posicionado como un hombre serio y cumplidor a su palabra.
Pero el reto que tiene como Fiscal General de Michoacán, es muy distinto, poner orden en la Policía Ministerial de Investigación, que durante años ha tenido los ojos de la opinión pública encima por sus nexos delincuenciales, no es una tarea fácil.
El lunes, cuatro presuntos homicidas salieron de prisión debido a un mal proceso, y sobre todo mala integración de la carpeta de investigación, ahí hay un grave problema que tiene muchos años ahora en la Fiscalía General, el Nuevo Sistema de Justicia Penal provocó un caos que aún no está solucionado.
Y es que el Sistema Penal acusatorio, llegó pero la preparación en Fiscales y policías fue deficiente, Adrián tiene un gran reto, muchos de los expedientes se han caído en el Poder Judicial por una mala integración.
Sin embargo, las expectativas en el ex secretario de Gobierno son muy altas, cómo se dice en política, llegó con un alto nivel de confianza en que hará un buen papel, sobre todo por su experiencia de segundo al mando del Ejecutivo Estatal, dónde mostró su capacidad.
Godoy Castro, el desgaste.
Martín Godoy Castro desde que llegó a Michoacán sufrió por un desgaste mediático y natural del poder, cinco años al frente de una institución que exige resultados diariamente no es una tarea fácil.
A pesar de eso, el ex procurador, tuvo varios aciertos que hay que destacar, la renovación de la institución a su cargo, refrescó algunas áreas que son de vital importancia y otras las certificó como el caso de Antisecuestros, que está catalogada como una de las mejores a nivel nacional.
Tal vez, el vínculo con el ex comisionado Alfredo Castillo Cervantes, no era su mejor carta, en otras condiciones, Godoy Castro ahora sería Fiscal de Michoacán.
El recuerdo.
Aún recuerdo en el 2006, Juan Antonio Magaña de La Mora era procurador de Michoacán, los homicidios de policías ministeriales eran constantes, las emboscadas sucedían de manera cotidiana, eso fue el detonante para que Lázaro Cárdenas Batel entonces gobernador pidiera el auxilio del Gobierno Federal, que desató la Guerra contra el Narcotráfico.
Designación de Fiscal provoca fractura
La designación del Fiscal General de Michoacán repercutió de manera fuerte en la bancada de Morena y en la Alianza por la Cuarta Transformación, que terminó fragmentada y con señalamientos de traición.
La lucha entre Cristina Portillo y Alfredo Ramírez Bedolla, fue a niveles de calificativos en redes sociales, la pugna interna se hizo visible y las repercusiones fueron evidentes, una avalancha contra el grupo morenista que ni las manos metió.
