Guerra Fría, una historia de amor apasionada en una época deprimente

Por: Marco Tavira

Director: Pawel Pawlikowski
País: Polonia.
Calificación: * * * * *

El arte en el cine surge de la perfecta conjunción de la creatividad, la inspiración, y la magia de un relato.
Con una prodigiosa visión, Pawel Pawlikowski, a través de la cámara de su fotógrafo, persigue a Wiktor, un pianista profesional y a Zula su joven, bella y contestataria alumna en un viaje a través de los años, y relata con poéticas imágenes su dolorosa, platónica, apasionada e incesante historia de amor. Son dos amantes condenados a amarse (Y también a separarse) en una época deprimente en la hostil Polonia de finales de los años cuarenta.

El director se decide por el blanco y negro, y al igual que Cuarón con su obra Roma, escribe y dirige una historia con tintes autobiográficos capturando hermosas secuencias cortas, creando con ello un estilo ágil y envolvente. El corte en cada secuencia de Cold War es el puente que separa un año del siguiente, así, durante los escasos 84 minutos de duración del filme ha transcurrido una década.

Cold War, es una pieza única en el firmamento fílmico, y la similitud con Roma la encontramos solamente en la forma, en la perfecta recreación de una época histórica y en el descubrimiento de una portentosa estrella; Joanna Kulig, que injustamente no fue considerada en las nominaciones al Oscar como mejor actriz, pero que es, sin duda, la revelación del año, a la par de Yalitza Aparicio.

No pierdan la oportunidad de admirar esta bellísima película que indudablemente se convertirá en un clásico de nuestro tiempo.

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