Por: Luis Ventura
El termino resiliencia proviene de la ingeniería, se llama resiliencia de un material a la energía de deformación (por unidad de volumen) que puede ser recuperada de un cuerpo deformado cuando cesa el esfuerzo que causa la deformación. La resiliencia es igual al trabajo externo realizado para deformar un material hasta su límite elástico.
Ahora bien en nosotros como personas la resiliencia es el proceso de adaptarse bien a la adversidad, a un trauma, tragedia, amenaza, o fuentes de tensión significativas, como problemas familiares o de relaciones personales, problemas serios de salud o situaciones estresantes del trabajo o financieras.
En nosotros es la capacidad de aguantar los chingadazos que la vida nos pone sin doblarnos ante ellos y salir avante.
Las actuales investigaciones han demostrado que la resiliencia es ordinaria, no extraordinaria, es decir, la gente comúnmente demuestra resiliencia, y ser resiliente no implica que la persona no haya experimentado dificultades o angustias, por el contrario, el dolor emocional y la tristeza son comunes en las personas que han sufrido grandes adversidades o traumas en sus vidas, lo que las ha llevado a ser resilientes. De hecho, el camino hacia la resiliencia probablemente está lleno de obstáculos a lo largo de las diferentes etapas de la vida de cualquier persona; es por esta razón que la resiliencia no es una característica que la gente tiene o no tiene, esto incluye conductas, pensamientos y acciones que pueden ser aprendidas y desarrolladas por cualquier persona, en otras palabras, es la capacidad de la persona a sobreponerse y enfrentar la adversidad.
Todos tenemos momentos difíciles ¿Cómo se pueden superar?
Superar los momentos adversos o traumáticos pudiera resultar más difícil de lo que nos imaginamos; no obstante, dentro de cada persona, existe un potencial llamado sobrevivencia que nos permitirá buscar las salidas para enfrentar las circunstancias que la vida nos presenta y que nos pueden hundir emocionalmente o nos permitirá sacar de nosotros lo mejor como seres humanos.
Existen 3 puntos fundamentales que tenemos que tomar en cuenta para superar esos momentos complicados:
Darse cuenta que no eres único que tiene dificultades. Todas las personas, sin excepción alguna, hemos pasado por adversidades, de mayor o menor grado; el que tú te des cuenta que más personas que quizá estén pasando por lo mismo que tú, o quizá dificultades mayores, hará que crezca en ti la empatía con la gente que te rodea.
La auto conmiseración no ayuda en nada. No te culpes, no te victimices, no te tengas lástima, ni sientas pena por ti, piensa que este momento es una etapa difícil, pero pasará, nada es para siempre, por el contrario, comienza a desear y visualizar la forma de salir adelante y si es necesario, busca ayuda de profesionales.
Mantente positivo. Es desear y tomar la decisión de salir adelante, tus pensamientos y acciones deberán estar enfocados en todo lo bueno que te permitirá ser fuerte, crecer, buscar salidas, ser más resiliente. Para lograrlo, debemos tomar en cuenta lo siguiente:
Es necesario fomentar y trabajar las siguientes cualidades:
Autoestima Consistente: Según Nathaniel Branden, la autoestima es “la disposición a considerarse a uno mismo competente respecto de los desafíos básicos de la vida, y sentirse merecedor de la felicidad”.
Tener una sana autoestima, es la principal base para conseguir ser una persona resiliente, quiérete, conócete, valórate, respétate y busca las mejores opciones ya sea de distracción, actividades creativas, culturales, de estudios e incluso de diversión. Piensa que no estás en competencia en esta vida, tu vida es única y tú decides hasta dónde quieres crecer.
Introspección: Es la capacidad de preguntarnos a nosotros mismos en la búsqueda de respuestas honestas, sin excusas, sin victimismos, con responsabilidad, sin ver las situaciones peores de lo que en realidad son. Te ayudará a madurar y ser objetivo, con ello encontrarás varios caminos para salir adelante.
Mantenerse íntegro: Cuando somos capaces de mantener vivos nuestros valores, sin ir en nuestra contra, por el contrario, defendiendo nuestra dignidad, nuestra integridad, nuestra propia vida y valores, aunque los demás no lo hagan o entiendan, tendremos la seguridad de salir mentalmente sanos de muchas adversidades.
Tener en todo momento integridad personal es comportarnos según lo que queremos y lo que somos, siendo congruentes con nuestros ideales y nuestra filosofía de vida.
Independencia: Esta consiste en la capacidad de mantener un alejamiento emocional y físico, de las situaciones conflictivas. Tiene mucho que ver con saber y aprender a poner límites, saber que el decir que no, no ofende y sí nos otorga independencia y libertad como seres independientes que también somos, de esta manera aprendemos a convivir en armonía y respeto con todos los que nos rodean y a su vez, también los demás comenzarán a vernos con respeto y a apreciar los valores que tenemos y lo que somos.
Sociabilidad: Una persona capaz de relacionarse con los demás, puede dar y recibir afecto, incluso en los momentos más duros de su vida y en las peores circunstancias externas. La baja autoestima y la autoestima exagerada son impedimentos para establecer una sana relación con la gente que le rodea, ya que te limita a ser empático y sensible. En esta sociabilidad, se desarrollan virtudes como la amistad, el compañerismo, convivencia y todo tipo de relaciones afectivas que podrán traerán beneficio en lo personal y que a la vez permitirán enriquecer cada ámbito de tu vida. Sal con amigos tomar un café, una copa, disfrutar de una amena conversación a todos nos enriquece.
Autoexigencia: Esta capacidad nos habla de personas que a pesar de estar en momentos duros o adversos, consiguen tener la iniciativa para superarse, para marcarse retos, para ir creciendo sin importar el medio en el que se encuentren.
“No desees que fuera más fácil, desea que fueras mejor. No desees menos problemas, desea más habilidades. No desees menos desafíos, desea más sabiduría”. Jim Rohn
Pensamiento crítico: Cuando tenemos esta cualidad, somos capaces de analizar las situaciones desde fuera, para tomar las decisiones adecuadas, responsabilizarnos del resultado de nuestras acciones y emprenderlas cuando sea necesario.
Muévete de a poco hacia tus metas aunque parezcan pequeño logros, estos te conducirán a tu objetivo final.
Vive con Humor: Poder reírnos de nuestros propios problemas, de nuestros propios errores, es algo fundamental. Nos evita o distrae temporalmente de las emociones negativas para así superar situaciones desfavorables. Reír, buscar los momentos agradables mejorará nuestro estado emocional y nuestra salud.
Mi caso
Yo, Luis Ventura De La Rosa Orozco, tengo discapacidad y en ocasiones me rio o bromeo acerca de tener discapacidad, lo acepto, lo vivo y trato de ayudar a otros para que acepten su condición de vida, de manera que no lo vean como una enfermedad o un problema; simple y sencillamente es una condición de vida que nos tocó vivir.
Debemos reflexionar acerca de nuestra propia singularidad, unicidad y valorar aquello que nos hace únicos y distintos, seamos rebeldes al estilo de lo que plantea Albert Camus: “El rebelde no niega la historia que le rodea y trata de afirmarse en ella. Pero se encuentra ante ella como el artista ante lo real, la rechaza sin eludirla. Ni siquiera durante un segundo hace de ella un absoluto”.
La vida es compleja, pero de esa complejidad es que emana la belleza de la vida y que mejor cuando nuestras experiencias de dolor las podemos socializar con otros para que puedan salir adelante, o les sea más llevadero su dolor.
“Si estás deprimido, estás viviendo en el pasado. Si estás ansioso, estás viviendo en el futuro. Si estás en paz, estás viviendo el presente”. Lao Tzu.
Lao Tzu sostenía que la razón de su felicidad era vivir el presente. Quienes siempre piensan en el mañana o recuerdan con nostalgia el ayer solo generan ansiedad, estrés, y dejan de disfrutar el momento y la verdadera existencia.
Gracias una vez más querido lector por regalarme su valioso tiempo esperando esto le sea de utilidad y con mi más sincera intención de que le sea de utilidad.
Luis Ventura
Licenciado en Derecho
Diplomado en Humanidades
Maestro en Derecho Constitucional
Estudiante de la maestría en Desarrollo Humano
Activista en materia de inclusión de las personas con discapacidad y Defensa de los Derechos Humanos