(Segunda Parte)
Por: Ángeles Nazares Jerónimo
La violencia política contra las mujeres, no concluye con la jornada electoral y los resultados electorales, también se da durante el periodo de transición y en el ejercicio del cargo, por lo que, senadoras, diputadas federales y locales, alcaldesa, sindicas y regidoras, pueden ser víctimas de violencia política. Así lo hemos observado durante el periodo previo a la toma de posesión, durante ésta y posterior a ella.
Sin lugar a dudas que los resultados electorales, pese a todo lo padecido por las mujeres, durante las campañas, fueron todo un éxito, que en un hecho histórico y sin precedentes en nuestro país, lograron una representación política de 63 mujeres y 65 hombres, lo que representa el 49.25% de mujeres y el 50.75 de hombres en la Cámara de Senadores/as y 241 mujeres y 254 hombres, es decir, un 48.2% de mujeres y un 51.8% de hombres. en la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.
De los 27 estados en los que se desarrollaron elecciones para renovar los Congresos Locales, de las 972 diputaciones que en conjunto se renovaron, el 49.5 por ciento correspondió a mujeres. Las entidades que obtuvieron el mayor porcentaje de mujeres electas como diputadas son: Morelos 70 %; Chiapas 65 %; Tlaxcala 60 %; Baja California Sur 57.1 %; Colima 56 %; Hidalgo 53.3 %; Querétaro 52 %; Aguascalientes 48.1 %; Campeche 57.1 %, y Tabasco con 51.4 %. Es decir, tienen una composición paritaria, lo que representa un significativo avance. (INE documento sobre la Participación Política de las Mujeres). Por lo que respecta a nuestra entidad, la integración del Congreso es de 15 mujeres y de 25 hombres, es decir, el 40% son mujeres, 2.5% menos que en la legislatura anterior, y el 60% hombres, aún estamos lejos de tener una composición paritaria en el órgano legislativo local, en cuanto a los ayuntamientos la presencia femenina se incrementó en 24 presidencias municipales encabezadas por mujeres, 88 sindicas y 1017 regidoras en la entidad. En el trienio anterior, solo 4 ayuntamientos se encontraban encabezados por mujeres. (Con información de mimorelia.com)
Sin lugar a dudas que los números son alentadores, pero no así, en las posiciones dentro de los órganos legislativos y en las administraciones municipales, ya que en ellas, vuelve a salir victorioso el sistema patriarcal, al seguir ocupando los hombres los espacios de toma de decisiones, de poder y de mayor exposición mediática, así hemos visto que los 7 partidos políticos representados en el Congreso de la Unión, tienen como coordinador de sus respectivos grupos parlamentarios a hombres, en ambas Cámaras, es decir, las Juntas de Coordinación Política de la Cámara de Senadores y de Diputados, se encuentran totalmente integradas por varones, en cuanto a las Presidencias del Senado y de la Cámara de Diputados, sus titulares también son hombres.
En lo que respecta a los espacios en los congresos locales y en los ayuntamientos, posterior a los resultados electorales han existido una serie de acontecimientos que evidencian las prácticas de exclusión, discriminación y violencia de que son objeto las mujeres políticas. Citamos algunos casos:
El caso que más ha llamado la atención lo es el ocurrido en Chiapas, conocido como las “Juanitas” o las “Manuelitas”, donde de manera masiva 36 candidatas electas presentaron su renuncia al cargo, entre ellas 26 electas como regidoras y 10 diputadas electas por el principio de representación proporcional, “son renuncias de planillas completas las que hemos recibido en el órgano electoral y hay indicios de que fue un mecanismo previamente establecido por los partidos políticos para que esos cargos sean ocupados por varones” señalo la Consejera Blanca Estela Parra Chávez.
En Tuxtla Chico renunciaron todas las mujeres electas por el partido local Chiapas Unido, 7 integrantes del cabildo; del Partido Nueva Alianza (Panal), 5; del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) 7 y de Podemos Mover a Chiapas, partido local 2 y 4 renuncias presentadas y no ratificadas de militantes mujeres de este mismo instituto político. 10 legisladoras electas por el principio de representación proporcional del Partido Verde Ecologista de México (Con información del Universal 07-09-2018). Los municipios de donde proviene las renuncias son Frontera, Comalapa, Tuxtla Chico, Mapastepec, Suchiapa y Larráinzar.
Otros casos, de violencia política son los vividos por la síndica procuradora electa Angelina Valenzuela Benítez del Municipio de los Mochis, Sinaloa a quien el Presidente Municipal electo Manuel Guillermo Chapman Moreno, excluyo sin razón alguna, más que por el sólo hecho de ser mujer, del Equipo de Transición, además de que fue invitada amablemente por el ahora secretario del Ayuntamiento, Andrés Estrada Orozco, a abandonar la reunión que se realizó para tal fin en el salón de Cabildo. (Con información de Noticias Altavoz).
En el municipio de Solidaridad, en Quintana Roo, se realizó una transición muy ríspida, realizándose un boicot del Cabildo contra la presidenta, Laura Beristáin Navarrete, quién en la primera sesión ordinaria, minutos después de rendir protesta como alcaldesa, por MORENA; el síndico Omar Sánchez Cutis y tres regidores de MORENA se aliaron con los cinco regidores de oposición y rechazaron la propuesta de titular para la Secretaría General. La presidenta fue amenazada de muerte, por lo que tuvo que abandonar la sesión.
En Mitontic, uno de los municipios más pobres de Chiapas, Manuela Martínez Ico, indígena de 60 años de edad, postulada por el PVEM, tomó protesta como alcaldesa, pero reiteró que será su esposo Erasto Ordóñez Rodríguez quien gobierne el municipio los próximos tres años, ya que en esa comunidad prevalecen los usos y costumbres, y las decisiones políticas, económicas y sociales las toman los hombres. (Con información del Sol de Puebla)
“Nosotros dos tenemos un acuerdo de que vamos a gobernar juntos porque yo no puedo gobernar por los usos y costumbres, yo no puedo gobernar por ser mujer, por eso hicimos el acuerdo de gobernar juntos de que él va ser el presidente y yo la presidenta”, justificó Manuela Martínez. En el caso de las regidurías, declaró, “ahí no hay de otra, quien las va a ocupar son los hombres: las mujeres solo prestaron su nombre”.
En el municipio de San Juan Cancuc, Chiapas, impidieron que Martha López Santiz tomara posesión como síndica del ayuntamiento, según reportó la Red Chiapas por la Paridad Efectiva (Repare). “Desde las 7:00 de la mañana estábamos listas para ir a tomar protesta, pero nos estaban cambiando a cada rato la hora, y decidimos ir a la presidencia. Cuando íbamos llegando (los agresores) se nos vinieron encima, y no nos dejaron pasar. Nos golpearon, a mí, a cuatro mujeres más y ocho hombres: somos 13 heridos López, quien postuló con el PRI, dijo que había sido amenazada “desde hace tiempo” porque el alcalde “no quiere que trabaje con él porque soy mujer y no le conviene trabajar con una mujer”, detalló. Relató que en dicho ayuntamiento un 50% de los cargos corresponden a mujeres “pero la mayoría prestó documentos para que trabaje su marido, su hermano o su papá”. “Piensan que yo haré lo mismo, pero yo quiero trabajar por mi pueblo, soy mujer, pero tengo derechos”.
Al tomar protesta las y los integrantes del Congreso de Chiapas, el líder estatal del PRI, Julián Nazar Morales, encaró e insultó a la diputada local Aída Guadalupe Jiménez Sesma, a quien le reclamó que no apoyara a su esposa para que fuera la coordinadora de la fracción parlamentario del tricolor en ese recinto legislativo.
Rosa López Moreno, excandidata a la presidencia del municipio indígena de Chanal, del partido Movimiento Ciudadano, denunció que en muchas localidades quienes van a gobernar realmente son los esposos porque “usaron” a las mujeres para cumplir con el requisito de la paridad de género.
Mencionó como ejemplo a Alejandra Martínez, del PRI, quien su esposo Roberto Pérez hacía campaña por ella. Y desde el primero de octubre, quien despacha en la presidencia municipal es él.
Viridiana Hernández, presidenta municipal de Simojovel, es otro caso en el que su esposo, Gilberto Martínez Andrade, quien es síndico municipal, es quien realmente gobernará ese municipio. Viridiana Hernández aseguró que las personas del municipio votaron por los dos “como pareja”.
El presidente del Instituto Electoral de Michoacán (IEM), Ramón Hernández Reyes, denunció que a una regidora le ha sido impedido por parte del nuevo ayuntamiento electo tomar posesión, no preciso el municipio y evito dar el nombre de la afectada, tuvo conocimiento de ello, por medio de una llamada telefónica con la Metapolítica. En Michoacán, el caso más dramático, fue el de la Sindica municipal de Buenavista, Tomatlan, Socorro Ortega Peláez a quien se le impidió ser Sindica, así como Presidenta Municipal del citado municipio, mediante un video expuesto en redes sociales, denunciaba las amenazas de las que había sido objeto, así como la inseguridad en la que se encontraba, por lo que tomó la decisión de dejar la política y cambiar su residencia a los Estados Unidos.
El 31 de agosto en Michoacán, el Instituto Electoral de Michoacán (IEM), “calificó como lamentable la prevalencia de dinámicas de violencia política contra las mujeres, de los que oficialmente se denunciaron seis, pero la cifra negra se advierte mayor.” Ya que las mujeres fueron hostigadas para que no asuman el cargo, esto sin precisar nombres y municipios. (Con información de la Agencia Quadratin).
Lo anterior, ha traído graves consecuencias para la participación política de las mujeres, pues, se observa que la igualdad formal expresada en la ley y particularmente en la paridad, por si solas, no han logrado que el avance sustantivo de las mujeres en los espacios de toma de decisiones y de poder, se dé de manera pacífica y sin violencia. Sin lugar a dudas que las costumbres y tradiciones representan un gran obstáculo para el avance político de las mujeres indígenas, por lo que se hace necesario atender las recomendaciones del CO-CEDAW.
Es imprescindible hacer un reconocimiento a la participación decida y oportuna de las y los integrantes de los órganos electorales, ante estos hechos, ya que ello, muestra el grado de compromiso con la participación política de las mujeres, quienes desde sus diversas posiciones han realizado pronunciamientos, denuncias, campañas, han sido un puente entre las afectadas y la autoridad –ejecutivos locales-, y sus propios partidos políticos y dirigentes. Han trabajado en ello, desde los Observatorios de Participación Política de las Mujeres, desde los Consejos Electorales en su conjunto o desde las presidencias de las diversas comisiones en las que se organizan al interior de los diferentes Consejos, como es el caso de la Comisión para el Fortalecimiento de la Igualdad de Género y No Discriminación del Instituto Nacional Electoral INE, que terminado el proceso electoral y reconociendo la existencia de dinámicas de violencia política contra la mujer, puso a disposición una plataforma donde las mujeres electas a un cargo de elección popular, reciban información y asesoría en caso de ser víctimas de violencia política de género, para lo cual, integraron un directorio de defensoras y defensores de Derechos Humanos. Esto con el fin de evitar que cuando se vuelven diputadas, senadoras, alcaldesas, sindicas o regidoras, no pierdan contacto con los organismos electorales y exista información para saber si están ejerciendo el cargo por el cual fueron electas o si enfrentan obstáculos para hacerlo.
Por todo lo anterior, los resultados electorales obtenidos en estos procesos electorales, en cuento a la participación política de las mujeres, nos dejan un muy buen sabor de boca y a la par nos muestran la desigualdad y la violencia interseccional que padecen las mujeres políticas. “Hay mucho que andar todavía para enfrentar y abatir una desigualdad que es estructural, sistémica y por tanto normalizada”. Enoe Uranga.