Por: Leovigildo González
La política es un Vaivén de sorpresas, pero no para quienes saben generar acuerdos y conocen perfectamente los tiempos para actuar e imponerse, tal es el caso de Paco Huacus, quien hace dos años llegó al Partido de la Revolución Democrática (PRD), y hoy, ya se ha ganado un lugar importante.
Silvano Aureoles fue quien le abrió la puerta al originario de Apatzingán al Sol Azteca, por lo que renunció a su militancia en el Partido del Trabajo, para comenzar a trazar camino junto al ahora ex gobernador de Michoacán.
Huacus leyó a tiempo los cambios en la forma de hacer política en el alicaido PRD, por lo que comenzó a generar acuerdos con la cúpula de ese partido que hoy lo tienen como coordinador de la bancada y un espacio en la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados.
No solo eso, Huacus, hoy tiene la certeza de que volverá a aparecer en las boletas y buscará nuevamente ser diputado federal del Distrito de Apatzingán, un territorio que ha recorrido durante la última década.
Zambrano, de manera inteligente logró «brincarse» la figura de Aureoles, que tiene un desgaste muy significativo en su estructura y prácticamente un pie fuera del PRD.
La terapia intensiva que viven en el perredismo, podría tener un nuevo brío con la figura de Huacus, quien asegura triunfo en uno de los distritos más complejos de Michoacán.