Por: Editorial
Lamentable lo sucedido en Charapan, donde tras amenazas Carlos Morales Bonaparte, alcalde de ese municipio decidió salir y gobernar en el exilio luego de que también se quedara sin policías.
No es el único municipio en donde su alcalde decide salir, también pasó en Chinicuila en 2021, pero actualmente la situación también parece empeorar.
Ha trascendido que al menos tres alcaldes hacen lo que realizó Morales, no presentarse en su municipio por miedo a los grupos criminales que se disputan cada centímetro del territorio.
Bedolla ha presumido que su Gobierno es «municipalista» pero en materia de seguridad los ha abandonado a su suerte, y él conoce perfectamente quienes son los que ya no despachan continuamente en sus Ayuntamientos.
Es evidente que las amenazas de los grupos delincuenciales no son menores, la fuerza de fuego que poseen está muy por encima de la que tienen los policías municipales, es ahí donde radica el miedo.
Charapan es un claro ejemplo de que hace falta un manotazo fuerte en materia de seguridad, de lo contrario, vendrá una ola de alcaldes que decidan gobernar desde el exilio.
Mientras tanto seguirá el #RuidoEnLaRed
