Por: Editorial
Marcelo Ebrard, actual canciller, ha sido golpeteado desde adentro del Gobierno tras los hechos trágicos de migrantes en Ciudad Juárez.
El secretario de Gobernación, Adán Augusto López, culpó a Ebrard de la responsabilidad sobre los lamentables hechos, a pesar de que el Instituto Nacional de Migración no es parte de su dependencia.
El maltrato a Marcelo es evidente y obvio, es una de las «corcholatas» más fuertes de Morena en la sucesión presidencial, y sabe que es su momento, aunque a simple vista la preferida de AMLO es Claudia Sheimbaum.
En esta semana, el canciller ha recorrido el país, y se reunió con Samuel García, Gobernador de Nuevo León, para revisar el proyecto de la llegada de Tesla, y este viernes con Enrique Alfaro, mandatario de Jalisco.
Ambos gobernadores son muy fuertes en el país, por la riqueza que sus estados generan, ahí, es donde Ebrard se siente cómodo, y si se rebela a AMLO seguro ya tiene un Plan B, no hay que descartar a Movimiento Ciudadano.
Mientras tanto seguirá el #RuidoEnLaRed