Por: Editorial
La calidad de nuestra democracia se va a medir por nuestra capacidad de disentir en un entorno de respeto. Debemos reconocer que desde que este país existe como nación, ha estado inmerso en una cultura autoritaria.
Hoy, grupos feministas intentan a través de una petición que alguien que no piensa como ellas sea depuesta de su cargo, sin respetar justamente eso, ese derecho a pensar distinto.
Yarabí Ávila, hoy lleva las riendas de la educación en Michoacán, es una mujer preparada para el cargo, pero eso no se cuestiona, si no a decir de estos grupos, es por estar a favor de grupos ProVida.
La lucha feminista, ha estado encausada en buscar el respeto, ¿por qué ella no puede disentir?, ¿en que afecta que no esté de acuerdo con sus agendas?.
La libertad de expresión debe estar por encima de cualquier filosofía, está en juego mucho.
Mientras tanto seguirá el #RuidoEnLaRed