LIBRE EXPRESIÓN.
Por: Carlos Alberto Monge Montaño
“Cada pueblo tiene el gobierno que se merece”. Anónimo.
El gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo, en entrevista con Ciro Gómez Leyva, sorprendió a propios y extraños con las declaraciones que hizo. Señaló que:
- Morena es un narco partido.
- Que Alfredo Ramírez Bedolla ganó gracias a la intervención del crimen organizado.
- Que los operadores fueron los ex gobernadores Leonel Godoy Rangel y Jesús Reyna García.
- Que la elección a gobernador de Michoacán debe anularse, de lo contrario, regresará a gobernar el crimen organizado.
- Que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, no quiere al Ejército, que lo tiene anulado y trae a los militares como albañiles.
- Que, de no atajar al crimen organizado, el riesgo es alto para que sean ellos quienes, en el 2024, pongan al próximo presidente de México.
- Que no está en contra de López Obrador, que, por el contrario, pretende ayudarlo.
- Que no descarta que sus opositores intenten meterlo a la cárcel y que incluso, será bienvenido ir a la cárcel por defender la verdad, a Michoacán y al país.
Por más sorprendentes que resulten sus señalamientos, está claro que Silvano Aureoles no es ningún improvisado. Seguramente la mayor parte de lo que dijo, lo tenía estrictamente calculado.
Hace un rato que evidentemente procura destacar como el contrapeso del inquilino de Palacio Nacional, eso le permite mantenerse vigente.
Aceptar que podría ir a la cárcel y hasta darle la bienvenida a semejante posibilidad en aras de la verdad, es una manera de curarse en salud. Sabe que llegará la embestida, como la ha anunciado el propio gobernador electo de Michoacán, Alfredo Ramírez, y claro que no se descarta que el propio López Obrador tome la iniciativa.
Parece que se equivoca al acusar directamente a Leonel Godoy y Jesús Reyna, quienes podrían tomar cartas en el asunto por la vía legal. A menos claro, que tenga las pruebas y presente las denuncias correspondientes. Por lo pronto, el diputado federal electo por Lázaro Cárdenas, Godoy Rangel, ya anunció que responderá legalmente.
Sin embargo, la mayoría de las acusaciones de Aureoles Conejo tienen respaldo. Ya son varios los trabajos periodísticos que cuestionan la intervención del crimen organizado en buena parte del país, y con mayor preocupación en la franja del Pacífico.
Esas señales o comportamientos atípicos del elector, no se deben desdeñar. Más allá de perdedores y ganadores, la presencia del crimen organizado en los procesos electorales y en la cotidianidad, es un problema que afecta al país entero, así que más vale que todos los niveles de gobierno le pongan atención y procuren soluciones. Hoy parece ser uno de los temas que no le interesan en lo más mínimo a López Obrador.
En medio de semejante disputa por el poder entre personajes que se conocen muy bien, que en otros tiempos han hecho equipo y han gobernado al estado desde hace 4 lustros, ya en el PRD, PRI y ahora con Morena, lo seguro es que pierde Michoacán.
Vale recordar que semejantes acusaciones no son la primera vez que se hacen y al final no pasó nada. Los que se acusaron contundentemente alguna vez, luego se hicieron amigos o cuando menos dejaron de pelear; las mieles del poder y las negociaciones para disculparlo todo en aras de mantenerse en la ubre del erario, suelen arreglarlo todo.
En fin, ya sea en una intención genuina o motivado por curarse en salud ante el futuro inmediato, Aureoles Conejo ha hecho señalamientos a los que indudablemente se les debe prestar atención, empezando por él mismo, que aún es gobernador de la entidad.
Por lo pronto, se anule o no la elección, lo metan o no a la cárcel, lo que se aprecia es que seguirá perdiendo Michoacán. ¿Usted lo ve diferente, estimado lector?
Con la esperanza de que haya una próxima vez… me despido, gracias.