Por: Leovigildo González
«El desastre que dejaron», «el neoliberalismo es el culpable», «el PRIAN», son frases muy utilizadas por el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, una técnica de discurso muy bien estructurada pero que ya comenzó a desgastarse.
Sin embargo, el grave problema de la inseguridad en el país ha mermado su popularidad y aceptación, esto a pesar de que el Legislativo le cumplió con la creación de la Guardia Nacional.
El 2019, su primer año de Gobierno, fue el más violento de la historia del país, con más de 35 mil homicidios, nuevamente echó culpas.
El domingo pasado, en Macuspana, Tabasco, el Presidente fue abucheado, no le gustó e increpó a los asistentes, quienes le respondían en tono molesto a lo que él preguntaba.
La tendencia a la baja de su aprobación, se da, por errores de él y su Gobierno; la indolencia ante el tema de los feminicidios también ha sido un motivo.
El Presidente, acepta que hay desgaste en su Gobierno, pero insiste en que es culpa de «otros», echa culpas de nuevo, insisto un discurso que es repetitivo pero que difícilmente tiene eco.
La falta de medicinas para el cáncer
Otro de los problemas graves de su administración, ha estado en el sector salud, la desaparición del Seguro Popular y lanzar el Instituto Nacional de Salud para el Bienestar (Insabi), fue una apuesta muy arriesgada.
Y es que el Insabi ha exhibido un sistema de salud a punto del colapso, que parece inerte, ya que no hay insumos suficientes como medicinas.
Los ataques en Twitter
Las críticas a su persona y acciones han aumentado considerablemente en las últimas semanas, el Presidente ya no es dueño de la conversación en redes sociales y su equipo se ha visto muy rebasado en la búsqueda de contención.
Así que de seguir con la «Rifa del Avión», y con los constantes desaciertos en sus declaraciones, será imposible que la aprobación mejore.
