Por: Editorial
Los primeros diez meses de seguridad de Andrés Manuel López Obrador han sido pésimos, a pesar de que ahora tiene una corporación a sus pies como lo es la Guardia Nacional.
El Presidente, ya desapareció a la Policía Federal, por lo que ha hechado mano de la Policía Militar y la Naval, para combatir el crimen.
Los homicidios, y la ingobernabilidad en algunos municipios han puesto en jaque a AMLO, por lo que urge replantear la estrategia de seguridad.
Hoy, el país requiere de un Presidente que pueda ver los problemas y busque soluciones.
Mientras tanto seguirá el #RuidoEnLaRed