Por: Redacción
• Recordó que el incumplimiento a la Ley General de Contabilidad Gubernamental implica responsabilidades para los servidores públicos
El diputado Norberto Antonio Martínez Soto, presidente de la Comisión de Programación, Presupuesto y Cuenta Pública de la LXXIV Legislatura del Congreso del Estado, hizo un llamado a los municipios a superar el rezago en armonización contable, la cual es una responsabilidad de los poderes, ayuntamientos y órganos autónomos, sin embargo, las autoridades locales son las que mayor rezago presentan.
Hizo mención que el incumplimiento a la Ley General de Contabilidad Gubernamental implica responsabilidades para los servidores públicos, ante lo que los ayuntamientos deben atender las obligaciones que determina la legislación, lo que implica orden y claridad en el manejo administrativo de las instituciones.
“Es necesario que los municipios en Michoacán trabajen para superar el rezago que registran en materia de armonización contable y logren concordancia con el avance registrado en el ámbito estatal”.
Tony Martínez recordó que la calificación de Michoacán en cuanto al avance contable sigue estando condicionada a los bajos índices de cumplimiento que aún registran los municipios del estado, por lo que es necesario redoblar esfuerzos en la materia.
Mientras el Consejo Nacional de Armonización Contable (CONAC) reporta un cumplimiento del 90.47% en el Poder Ejecutivo del Estado, y el 82% en los poderes Legislativo y Judicial así como órganos autónomos, en el caso de los municipios no supera el 43%.
Reiteró que el incumplimiento a la Ley General de Contabilidad Gubernamental implica responsabilidades para los servidores públicos, las cuales pueden ser administrativas, económicas, inhabilitación o incluso prisión.
La falta de cumplimiento en los municipios afecta la calificación general de Michoacán, pues no se logra superar los 50 puntos porcentuales ante el Consejo Nacional de Armonización Contable.
Cabe señalar que la CONAC divide los municipios michoacanos en dos rubros, los mayores y los menores, los primeros con un grado de cumplimiento del 42.96%, y los segundos con apenas un 30.66%.