Por: Editorial
La LXXIV Legislatura de Michoacán nuevamente se ve envuelta en un escándalo, debido a que presumiblemente se filtró el examen a algunos aspirantes a la Auditoría Superior de Michoacán.
Y aunque entre los diputados se echan la ‘bolita’ lo cierto es que la poca transparencia, los acuerdos debajo de la mesa, y sobretodo la forma en que llegará el próximo Auditor, carecerá de legitimación, algo que sin duda requiere para entregar resultados.
En caso de no echar abajo la forma de designación, llegará con muy poca credibilidad quién esté al frente de auditar los recursos públicos de Michoacán.
Y es que casualmente dos aspirantes, Moisés Pardo y Miguel Ángel Aguirre tuvieron 19 aciertos de 20, mientras que Héctor Acosta tuvo 20 de 20, lo que ponen en duda a los legisladores encargados del proceso, ya que evidentemente se notan los dados cargados.
Vaya, la forma descarada con la que actúan algunos legisladores tendrá repercusiones en un futuro no muy lejano ya que el 2021 está a la vuelta de la esquina, y no se salvan de ningún partido político.
Mientras tanto seguirá el #RuidoEnLaRed