Por: Editorial
Las constantes reuniones de Alfredo Ramírez Bedolla, ex coordinador de Morena en el Congreso del Estado con el dirigente perredista Antonio Soto, así como Erik López Barriga, jefe de la Oficina de Silvano Aureoles, ha puesto en duda su lealtad al partido guinda en el Legislativo.
Las reuniones se han registrado en restaurantes exclusivos de la capital michoacana considerados como ‘Fifi’, que han quedado plasmadas en distintas imágenes que hicieron llegar a la redacción de Sala de Prensa.
Hay que recordar que hace un par de meses mayoritearon a Ramírez al interior de la bancada morenista, por dudas sobre su capacidad, y le quitaron la coordinación de la misma, lo que ha provocado una separación con sus compañeros y aparentemente encontró aliados en el PRD.
La designación de César Osegueda (hombre cercano a Ramírez) como subsecretario de Enlace Legislativo, puso en alerta a propios y extraños.
No se lo tomen a mal esto no es NADA PERSONAL